¿Sabías que si caminas descalzo en la arena, puedes evitar múltiples enfermedades crónicas?
Si has experimentado esa agradable sensación que se produce al caminar descalzo sobre la arena, a la orilla del mar, te contamos que se debe a que la tierra te está emitiendo un flujo ilimitado de electrones de curación. Estos electrones actúan como pequeños antioxidantes: limpian los radicales libres y toxinas que se obtienen del metabolismo natural del organismo y de la exposición al medio ambiente en el cual estamos insertos día a día.
El mundo civilizado está, literalmente, separando al hombre de la tierra. La industrialización y la introducción de plásticos y otros materiales sintéticos lo han ido desconectando: la humanidad se aisló de la mayor fuente de curación, considerando que alguna vez, se caminaba descalzo por la hierba y se dormía en pisos de tierra, frescos de las cuevas. Ahora se vive por encima del suelo, separados de la tierra por pisos elevados de madera, zapatos con suela de goma, y a veces cientos de metros separados del aire. ¿Qué comenzó a suceder entonces? Se desató una explosión de enfermedades causadas por la inflamación, la cual es el principal factor de riesgo, especialmente las crónicas. Las investigaciones de Clint Ober y James Oschman (uno de los asesores científicos de las máquinas utilizadas en BIOMEDICS) establecieron esta explosión, como el “Síndrome de la Deficiencia de Electrones”.
Volver a tener contacto con la tierra a través de un proceso llamado “Earthing” podría revertir esta deficiencia, disminuyendo la inflamación y mermando su riesgo de todas las enfermedades que se originan por la inflamación, como la cardiovascular, diabetes, artritis, estrés y muchas otras. La explicación es la siguiente: los radicales libres se producen principalmente a través de los procesos metabólicos, aunque también se obtienen por los alimentos que se consumen, el agua que se toma y el aire que se respira. El sistema inmune es el principal generador de radicales libres y está en funcionamiento las 24 horas del día. Esto crea la necesidad de un «eliminador» para absorber o eliminar electrones de manera que la estabilidad eléctrica se pueda mantener dentro del cuerpo. El contacto con la tierra desempeña este papel. Y es casi instantáneo. Según el Dr. James Oschman, biofísico y coautor de Earthing: The Most Important Health Discovery Ever? “Los electrones que entran en la planta del pie se pueden mover a cualquier parte del cuerpo. En cualquier lugar en el que se forma un radical libre, hay electrones que pueden neutralizar esos radicales libres y evitar alguno de esos procesos: daño mitocondrial, entrecruzamiento de proteínas y la mutación daño genético. Así que si está descalzo, cargará electrones y su cuerpo los almacenará y estarán disponibles para cuando tenga una lesión o para cuando se formen los radicales libres”.
La proximidad es la clave. Entre mayor distancia haya entre la persona y la tierra, mayor será la carga sobre el cuerpo. De hecho, ésta ha sido calculada con precisión. Por cada metro que un organismo esté por encima de la tierra, se acumularán 300 voltios de carga. Las personas están rodeadas por los cables de electricidad escondidos en las paredes de la casa, lo que contribuye a su carga eléctrica positiva (la Tierra tiene carga negativa), aumentando el estrés del sistema inmunológico. Y si a eso se le suma el computador por varias horas al día, uso del celular, seguido por una o dos horas de televisión, se está recibiendo varias exposiciones muy fuertes. Aunque tener contacto con la tierra no elimina la exposición peligrosa a los campos electromagnéticos, el riesgo de efectos adversos para la salud provocada por ellos, se reduce drásticamente.
Entonces, se puede decir que el Earthing ofrece innumerables beneficios potenciales para la salud desde mejor sueño, menos dolor e inflamación, hasta reducir el riesgo de diabetes, cáncer, enfermedades del corazón y muchos más. La investigación en esta área apenas está comenzando.
¿Cómo obtengo contacto con la tierra? Aquí unos consejos prácticos:
– CONÉCTESE CON LA TIERRA: El contacto con la tierra es la estrategia básica más económica, que permite resistir ese tipo de daño biológico y disminuir el riesgo de que el cuerpo desarrolle inflamación prolongada: simplemente, deje que los pies descalzos tengan contacto con la tierra, especialmente en cuando está húmeda, y lo más frecuente posible. Dado que el agua es un excelente conductor, el agua de mar es la mejor opción. Nadar en el mar, meter los pies, o caminar en la playa de arena son excelentes maneras para conectarse con la tierra. Si uno, no tiene acceso a la playa, el pasto húmedo es un buen sustituto.
– USE “DISPOSITIVOS GROUNDING”: En el mercado, existe una amplia variedad de cojines, alfombras, cobertores, sábanas y parches con los que, en contacto con la piel, restauran esa conexión tan necesaria con la tierra. Cual sea el dispositivo, está conectado a un cable que se enchufa a la corriente normal de la casa. Para que funcione, el enchufe debe estar conectado a la tierra. En Estados Unidos, alrededor del 40% de las casas no tienen cable de tierra en la pieza, sobre todo las casas construidas antes de 1970. Aunque los enchufes hayan sido reemplazados, no están necesariamente conectados a cualquier cable de tierra, y la única manera de determinar esto es ponerlos a prueba. Si su enchufe no está conectado a la tierra, entonces busque la ayuda de un eléctrico para que le instale un cable de tierra. Hay bastantes maneras de hacerlo.
(Extracto de la nota escrita por el Dr. Mercola en su sitio web de salud natural). Mira la nota completa en: http://articulos.mercola.com/sitios/articulos/archivo/2014/10/21/inflamacion-cronica-y-caminar-descalzo.aspx?utm_source=espanl&utm_medium=email&utm_content=lomasleido&utm_campaign=20160622_NB&et_cid=DM111132&et_rid=1540053729)